
“Poseemos mucho más poder de lo que creemos”
“Identificando los programas, te permite reprogramarte. Cambiándose a sí mismo, cambiamos el mundo”
El ADN se encuentra en el núcleo e cada célula formando 46 filamentos cromosómicos y aparecen en forma de 23 pares.
Para transmitir sus mensajes e instrucciones usa el ARN.
El ADN genera además una corriente eléctrica que pasa por un circuito cerrado creando su propio campo magnético, la espiral del ADN que vuelve a enrollarse sobre sí misma y es sensible a influencias magnéticas.
Contiene nuestras improntas ancestrales y raciales incluyendo otros códigos. Crea huellas dactilares distintas para cada persona y es responsable de nuestras capacidades naturales. Constituye una base de datos extraordinaria.
Las 13 hélices y su conexión con los 13 chakras
- Hélice 1 – 1º Chakra – Físico, supervivencia
- Hélice 2 – 2º Chakra – Físico, creatividad, poder y sexualidad
- Hélice 3 – 3º Chakra – Clarividencia (percepción intuitiva), poder y voluntad
- Hélice 4 – 4º Chakra – Corazón, centro de la compasión y sentimiento de completa conexión con todas las cosas, capacidad corporal para vibrar a la frecuencia de las 13 hélices = alineación eléctrica.
- Hélice 5 – 5º Chakra – Habla, alineación magnética; el cuerpo se alinea con sus 13 hélices, libertad creativa.
- Hélice 6 – 6º Chakra – Visión, cuerpos sutiles, conexión de estos con la 13º hélice, discernimiento.
- Hélice 7 – 7º Chakra – Abre nuestra consciencia al hecho de que nuestra identidad se expande más allá de la forma física: espíritu/materia.
- Hélice 8 – 8º Chakra – Colores, conexión con el mundo entero, causa original. Este 8º chakra y los que siguen se hallan fuera del cuerpo físico.
- Hélice 9 – 9º Chakra – Formas geométricas del universo; conexión con los planetas asteroides, equilibrio.
- Hélice 10 – 10º Chakra – Sonidos del universo, unión, conexión con nuestro universo y el sistema solar, unidad.
- Hélice 11 – 11º Chakra – Interacción, interdimensionalidad (multidimensionalidad); otros universos (el vacío y la rejilla cósmica)
- Hélice 12 – 12º Chakra – Saber de forma irrevocable que somos seres humanos con un código completo; sentirse realizado y en paz con respecto a nuestra auténtica identidad, conexión con la fuente.
- Hélice 13 – 13º Chakra – Ancla la reconexión en el cuerpo físico; permite que la energía circule libremente entre las 13 hélices, 13 chakras y el cuerpo, cohabitando así dos espacios a la vez, haciendo que se fusionen el yo terrestre y el yo celestial o Ser (esencia)
Cualquiera que trabaje sobre su ADN se sumará a la masa crítica (centésimo mono). Cuando reactiva programas perdidos se convierte en estación repetidora para el entorno e informa energéticamente al ADN que les rodea de su potencial para recodificarse.
El ADN está constituido por códigos perdidos originales ocultos, antepasados biológicos a través de generaciones-programa y programaciones subconscientes de padres y entorno. Es como un PC que contiene Windows, linux y otros programas.
Intenciones conscientes ayudan a romper con los programas por defecto que son inconscientes y vienen de la infancia u otro espacio-tiempo. Esto significa hacer “click” en nuestro pc y elegir ajustes distintos a los instalados por defecto.
Es uno de los motivos por los que dejamos que “nos conduzcan” intenciones anticuadas y por defecto. Es por ello que hay que mirarse a sí mism@ y llegar a un acuerdo con las vulnerabilidades, en lugar de apartarlas esperando que todo se resuelva solo, hay que tomar responsabilidad para enfrentarse a la realidad de la vida.
- La vulnerabilidad o bloqueo
- Sentirse atascado en el entorno donde estamos
- Sentirse cargado por un sentido del deber (“tengo que…)
- Compararse con los demás (superior o inferior)
- Desconfianza en sí mismo (¿Qué debería hacer?¿Cuándo?¿A dónde?)
- Palpitaciones, falta de aliento, reacciones fisiológicas limitantes
- Especulación obsesiva, la incapacidad de soltar
- Falta de autoestima
- Malestares físicos o emocionales que o bien tiran de tí hacia el pasado o te impulsan hacia el futuro
- Cualquier reacción o comportamiento que sea anticuado, que no tenga un fundamento en la realidad actual y se repita inconscientemente. Integrar es la clave, para crear nuestra “salvación” o verdadero poder; viene de aceptar la naturaleza humana en lugar de rechazarla
Tendemos a magnificar nuestro lado espiritual diciendo “sólo soy verdaderamente bell@ cuando estoy viviendo en la luz y amor incondicional”. Sin embargo, la belleza y poder auténtico surgen al equilibrar luz y sombra, siendo la última el lado más frágil y vulnerable. Esa es la llave para abrir la riqueza oculta de nuestro Ser.
Integrar la dualidad con la intención, permite anclarla a nuestra vida cotidiana. Sin negatividad, ni juicios para pensar y entrar en un proceso que ya no es lineal, sino “circular” o global.
Se puede de esta forma deshacer programas por defecto que se heredaron genéticamente o que ha adquirido de un modo inconsciente (patrones, hábitos, mecanismos automáticos de defensa, órdenes proteínicas defectuosas debido a enfermedades, químicos…)